MIGUEL JARA
¿Son todas las vacunas necesarias? ¿Y efectivas? ¿Y seguras? ¿Nos están ocultando información entre laboratorios y administraciones públicas para que el «negocio saludable» que en parte son las vacunaciones masivas y sistemáticas no deje de serlo? Los calendarios de vacunación no han parado de crecer en los últimos años, tanto en número de vacunas como en dosis, y desde los laboratorios farmacéuticos se presiona para que ciertas vacunaciones se adelanten. Está claro que para algunos, normalmente pertenecientes a la parte interesada, cuantas más vacunas pongamos a nuestros hijos y antes lo hagamos, mejor, una actitud que despierta la desconfianza de una población cada vez más informada. Las sucesivas campañas de marketing del miedo a las gripes por ejemplo, a la aviar en 2005 y a la gripe A en 2009 impulsadas por laboratorios y Gobiernos han sido decisivas a la hora de variar la percepción que se tiene de las vacunas. A ello se suman los efectos adversos de la vacuna del papiloma, cuya a